Los muros de una cancha de futbol rápido y el césped sintético son parte de los salones de niños de cuarto, quinto y sexto de la primaria José María Morelos y Pavón, de la comunidad Magdalena de Los Reyes, Santiago Tianguistenco, tras el sismo de 2017.
Sin embargo, a más de cuatro años del fenómeno natural, la comunidad reclama el espacio porque lo quieren para hacer bailes y labores recreativas.
El temblor obligó a los directivos de la escuela a mudarse a esas canchas, que colindan con el plantel, aún en reparación.
Después del movimiento telúrico comenzó la odisea para niños y docentes. De la escuela sólo quedaron funcionales dos de 12 salones, por ello primero se mudaron debajo de carpas y sobre tarimas. Después, por las lluvias y las bajas temperaturas, se montaron aulas prefabricadas y se acondicionaron seis salones que hicieron con tablaroca y lonas.
El maestro Juan Jiménez Antonio, uno de los que da clases en la cancha, lamentó las condiciones en las que imparten las lecciones: “El lugar es prestado, sabemos que estas instalaciones son de la comunidad, y pues también ésta necesita este espacio para practicar deporte”, indicó.
La dirección de la escuela y los baños están en lo que originalmente son los vestidores del campo. Además, subió el número de alumnos, de 12 grupos pasaron a 16, que suman 396 alumnos.
Jorge Luis Lara Mayola, subdirector académico, explicó que les preocupa la situación porque saben que todavía faltan recursos para concluir el plantel.
“La comunidad está reclamando estos espacios; nos preocupa el hecho de que ellos nos piden las instalaciones y tenemos 70 por ciento de avance”, dijo. El 6 de enero deberán regresar el lugar, pues está programado un baile.
En tanto, el secretario de Educación, Gerardo Monroy Serrano, informó que en diciembre esperan concluir a 100 por ciento la rehabilitación de las cuatro mil 909 escuelas dañadas por el sismo.
CAR