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El Congreso del Estado de México es el primer poder legislativo en el país que lanzó un protocolo de atención de presuntos casos de violencia laboral, discriminación, hostigamiento sexual y acoso sexual.
La medida buscará conformar normas específicas de prevención y asistencia de conductas de agresiones y hostigamiento, con el fin de promover una cultura institucional de igualdad de género, así como favorecer un ambiente de trabajo libre de violencia en el Congreso mexiquense.
Actualmente, la LX Legislatura es la que por primera vez en su historia se integró por una mayoría de mujeres, al ocupar 37 de los 75 curules en el órgano.
“Es importante establecer, en el ámbito de su competencia, una guía con directrices para prevenir y atender presuntos casos de violencia laboral, discriminación, hostigamiento sexual y acoso sexual de las personas servidoras públicas del Poder Legislativo”, indicó el documento sobre los motivos por los que se elaboró el protocolo.
Los incidentes, explicó el protocolo, serán antendidos por la diputada Diana Martínez Tello, quien encabeza la Unidad de Igualdad de Género y Erradicación de la Violencia, para brindar atención a las presuntas víctimas y recabar su caso para ser canalizado a las autoridades.
También la unidad será encargada de promover la “tolerancia cero” frente a conductas de agresiones laborales, discriminación, hostigamiento sexual y acoso sexual, a través de medios o canales de comunicación institucionales.
También establecer un registro de los casos de actos ilícitos, agresividad en los espacios de trabajo y acoso sexual para dar seguimiento e implementar acciones de prevención que los inhiban o disminuyan.
Actualmente, en el Congreso del Estado de México los grupos partidistas son intregrados por 20 mujeres por el partido Morena, seis por el PRI y cuatro por Acción Nacional.
Por José Ríos
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