Durante la temporada invernal, los más de mil ejemplares de 152 especies diferentes que conforman la población del Parque Ecológico Zacango reciben un cuidado especial para que puedan soportar las bajas temperaturas, que alcanzan hasta menos 3 grados centígrados durante las madrugadas en esa zona.
A través de acciones preventivas como vacunación, cambio de alimentación para elevar sus defensas y calefacción, se protege a los animales que habitan el espacio para evitar riesgos de contraer alguna enfermedad viral, informó la veterinaria Michelle Ocampo, del Área de Bienestar Animal.
Los más vulnerables son los “gerontes” o adultos mayores, los primates y las aves, que cuentan con un programa de vitaminacióny calefacción en sus dormitorios.
“Antes de que empiece el invierno se les empiezan a suministrar vitaminas porque son susceptibles a las gripas. Muchos tienen calefactores en sus habitaciones. Todos los primates están en el protocolo y los gerontes, que ya son muy viejitos. A algunos les damos cobijas sobre paja fresca”, comentó Ocampo.
Las aves también son vitaminadas y por las noches se encienden focos con luz roja que no emiten luz común, sino calor para mantener la temperatura correcta sin dañar su ciclo circadiano.
Algunos herbívoros, como dromedarios y búfalos, que aguantan bajas temperaturas, también cuentan con cuartos para su resguardo, pero sin calefacción.
Antes de que entre el invierno y durante toda la temporada invernal, que va de noviembre a abril, todos los habitantes de Zacango modifican sus dietas para que consuman más vitamina C y se les dan suplementos alimenticios “para aumentar la masa muscular y elevar su sistema inmune, que les ayude a soportar las temperaturas bajas”.
Existen especies que tienen adaptaciones naturales como los osos y lobos, que cambian de pelaje para soportar los fríos.
PAL
